El photocall ya no es “ese rincón bonito para las fotos”. En 2026, se convierte en una experiencia inmersiva, un pedacito de arte que habla del estilo de la pareja (y de su nivel de Pinterest, seamos sinceros).
Aquí te contamos las tendencias que están marcando el rumbo este año para que tu photocall boda no parezca de 2018 ni de comunión.
Índice de contenidos
Photocall personalizado minimalista: El minimalismo con alma
Menos es más, pero con intención. Los photocalls de 2026 apuestan por estructuras limpias, materiales naturales y tipografías elegantes. Piensa en tonos piedra, lino y madera clara, con letras corpóreas retroiluminadas que parecen flotar sobre el fondo.

Naturaleza en tu photocall (de verdad)
El verde sigue de moda, pero no vale cualquier hoja de plástico. Ahora se lleva lo vivo, texturizado y fresco: ramas de olivo, helechos, eucalipto y flor preservada con un toque dorado. Ideal para bodas en finca o exteriores, donde el photocall se integra en el entorno y no compite con él.


Neón para boda: Luces que cuentan historias
Los neones personalizados siguen reinando, pero evolucionan. Este año veremos combinaciones con letras 3D y LED ocultos, creando efectos de halo o brillo suave. Los mensajes cambian: menos “Better together”, más frases auténticas o divertidas que reflejen a la pareja.

Colores inesperados
El 2026 llega con una nueva energía cromática: las bodas se llenan de carácter con paletas arriesgadas que rompen esquemas. Colores como el coral, el terracota, el lavanda o incluso el negro mate con iluminación cálida marcan tendencia en photocalls y rincones decorativos.
Estas combinaciones no buscan saturar, sino crear impacto visual con equilibrio y personalidad. La clave está en el contraste bien pensado, no en llenar de color por llenar. Un fondo neutro con un toque vibrante puede transformar una escena sencilla en un espacio sofisticado y memorable.

Escenografía 360º
Y no estamos hablando del más que visto photocall 360 dónde la cámara da vueltas y vueltas. Estamos hablando de un concepto diferente donde los photocalls dejan de ser “de pared” para convertirse en microescenarios. Los invitados pueden entrar, sentarse, moverse… y el resultado son fotos mucho más naturales. Se integran bancos, estructuras curvas, flores suspendidas y rótulos que envuelven el espacio.
Personalización real
Los photocalls ya no solo llevan nombres: cuentan historias. Fechas grabadas, símbolos, frases de películas o incluso mapas estelares del día de la boda. El objetivo: que cada foto tenga algo de ellos.

El photocall perfecto en 2026 no grita, susurra con estilo. Combina diseño, luz y emoción. Es sostenible, elegante y fotogénico. Y sobre todo, es tan único como la pareja que se casa.
Si estás preparando una boda y quieres crear un photocall personalizado que sea la joya visual del evento, en rotulatumismo.com te ayudamos a diseñarlo desde cero, con materiales, acabados e iluminación a medida.


